Crónica del Rock en el Parque XI

Ayer, sábado 17 de enero, me di un salto a los Olivos, al Súper Complejo (yo alucinaba un campo grande) en el Óvalo Naranjal. Salí de mi casa tarde (para variar como todos los sábados) y llegué al local gracias al Súper Chino.

En las afueras del local había mucha gente sentada, conversando y bebiendo; por un momento pensé que se había cancelado el concierto. Felizmente no fue así. Compré mi entrada en la puerta y me puse a buscar a la gente de Zubpunk, los encontraría dos horas después.

Empiezo la narración desde Tragokorto (me perdí Difonía, Daniel F y Valerie Series). Empezaron con su punk rock show, por ahí vi a un chiquillo siendo retirado por efectivos de seguridad. Los Tragokorto no tocaron Plaza Francia!, pero sí "Desilusionado de un ángel", "Dime tú" y "Borracho en el bar". Yeah!

Siguió La Mente. Uno de los vocalistas subió al escenario con muletas pero no fue impedimiento para empezar la pachanga. Primera vez que los escucho y no estuvieron nada mal. Pasaron unos videos suyos en la pantalla gigante muy graciosos y la gente estaba dejando volar "la mente". Buena onda.

Turno de Contracorriente. Recién me enteré que cambiaron de baterista. No soy fan-fan de ellos pero tocaron muy chévere. El pogo fue brutal, los recién saliditos del gimnasio se habían preparado para ese momento. Tan enérgica fue la interacción poguera que los Dark Dragon (seguridad del concierto) quisieron retirar a algunos de los muchachos, fracasando en el intento porque puedes meterte donde sea, menos interrumpir un pogo hardcore. Y por esto los dos gorilones de seguridad son casi aplastados por una masa 30 chicos gritando ¡contracorriente! No es que apoye la violencia pero en un pogo de esos cada uno es responsable de los golpes que recibe. De todas formas a una chica siempre la tratan con respeto (por ahí vi a una niñata repartiendo codazos impunemente con "Fatal", ja ja ja).

La hora esperada para los que no fueron a Sargento Pimienta en diciembre, con ustedes... G-3. Le dedicaron "No es sólo tu culpa" al fallecido Constantino Carvallo. No pude evitar entrar al pogo de "Ahora o nunca", "Mayoría equivocada" y "Antisocial". Lástima que la guitarra de Pipe no se escuchaba nada, ningún punteo pude dinstinguir y no es que me esté quedando sordo.

Luego, la furia brotó con los Asmereir. Arrancaron con "Furia reciclada", seguidas de otras canciones reggae que no llegué a escuchar la letra porque el volumen micrófono de Mark estaba casi nulo. Me zambullí también con "Racista", "Nada nadie", "No entienden", "Surfer" y finalmente jalé para "Trauma represiva". Excelente show.

Después de los furiosos, seguían Diazepunk pero como ya los había visto "n" veces, decidí irme a casa. Y es un lío regresar del Naranjal. Viajar hasta la plaza Dos de Mayo porque no habían carros (me di cuenta que era la 1 am), caminar sin detenerme por la Av. Sodoma y Gomorra (perdón, Paseo Colón) hasta Wilson, y desde ahí viajar a la Av. Javier Prado; el resto ya es dormir en otro carro hasta llegar mi destino final con un plato de anticuchos previo comprado en una esquina.

El concierto estuvo bacán, se presentaron mis bandas favoritas que tocaban en la tarde pero no los llegué a ver porque llegué a las 7:30pm aproximadamente, pero así estaba programado. A ver si un día me hago un festival completo desde el mediodía.

Lo malo es que desde que fui al Lima Hot Festival siento que el sonido de los conciertos locales deja mucho que desear. No pude escuchar la guitarra de Pipe ni la voz de Mark entro otros muchos detalles ¿cuál es la explicación? El día anterior hicieron las pruebas de sonido pero, en serio, hace falta mejorar en ese aspecto. ¡Y tampoco pusieron la banderola del Rock en el Parque en el escenario!

A pesar de todo, valio la pena ir al REEP y la gente la pasó súper, pero fácil que ya no voy al próximo si la infraestructura no mejora.

¿Qué sigue? ¡Silverstein en febrero! :D