sábado, 26 de septiembre de 2009

Propuesta: La Cuota de Música Nacional


Hace casi dos meses en el mundo de la red y otros medios se abrió la polémica sobre la controversial postura de APDAYC por establecer tarifas injustas y un canon a los dispositivos digitales que afectan a los usuarios de una manera abusiva. Como todo este lío de piratas, corsarios y criollos tiene para rato, este blog intenta lanzar una propuesta que espero que sea acogida entre los usuarios y se le ocurra también a algún congresista y se someta a una discusión interesante: La Cuota de Música Nacional.

Allá por 2005 leí un artículo de una revista para ingenieros electrónicos (se llamaba The Broadcaster, creo) la cual mencionaba sobre la existencia de una ley que aseguraba la difusión de la música nacional en Alemania mediante una cuota obligatoria en la programación radial. De esta manera encontré que Francia había aplicado una ley parecida muchos años atrás estableciendo un 40% de música francófona en las emisoras. ¿Y si existiera una ley similar en Perú?

En el contexto actual, pocos músicos peruanos tienen oportunidades para la difusión de sus trabajos a menos que se dediquen a un género que esté de moda y reciban la cobertura de los medios por algún tiempo. La aplicación de una cuuota de música nacional haría que todas las radios estén en la obligación de brindar espacio a los músicos peruanos, estimulando la producción de éstos compitiendo por un espacio en una determinada estación. Debido a la moda de la cumbia, radios como La Q, La Mega, La Caribeña sí dan espacios a músicos peruanos; en cambio, en radios como Planeta o Studio 92 nos pudren los oídos con los Jonas Brothers, Lady Gaga, Rihanna y otras pestes. Lo peor termina siendo Doble Nueve (99.1 FM) que personalmente es la que más me gusta pero no ofrece ninguna canción peruana, cosa muy distinta a épocas de inicio de siglo cuando transmitían música de 6 Voltios, Daniel F, D'Mente Común, Contracorriente, etc.

Así es, la música nacional está de mal en peor. No es por pecar de nacionalista radical pero tenemos que aceptar que muchas veces la música extranjera no demuestra ser la gran cosa. ¿Alguien recuerda a Líbido? ¿se escucha su música ahora? ¿por qué no le dan bola a Pierina Less y sus nuevos proyectos? ¿qué les pasó a Daniella Saettone y a Fuera del Resto? ¿por qué todos alaban a Daniel F y Leuzemia si jamás ponen un maldita canción de ellos en la radio?

Muchos dirán: "Porque obviamente los músicos peruanos son malísimos. Ninguno se compara a Oasis, por ejemplo". Opinión discutible y puede que tenga cierta validez en algunos casos, pero se debe mucho a la falta de apoyo de los medios para generar un círculo virtuoso en la producción musical en diversos géneros dentro de nuestro país. Si conseguirse una guitarra eléctrica aquí es más difícil que conseguirla en México o Estados Unidos, imagínense cuan más complicado se volverá cuando se te cierran las puertas en las radios. Es cierto, la modernidad de nuestros tiempos nos muestran alternativas como MySpace, PureVolume o Last.fm pero por el momento ninguno tiene tanto poder de difusión en el Perú como las radios que son parte de nuestros viajes en autobús, taxi, mototaxi o carrito nuevo. ¿Estaremos esperando a que otro grupito audaz aparezca en MTV -que por cierto ahora pone cualquier cosa- para enorgullecernos y decir "qué bien, ellos son peruanos"?

En Chile también se ha estado tratando la aplicación de esta ley. Creo que si APDAYC en serio quisiera apoyar al músico y compositor nacional la promoción de la cuota de música nacional sería más saludable que sus ridículos cánones y tarifas. Obviamente encontraremos resistencia en las radios que se llenan los bolsillos vendiendo música manufacturada. Ojalá algún día músicos peruanos tan prolíficos como los hay en Argentina salgan a la luz, ¿cómo creen que siguen saliendo más Charlies, Fitos, Calamaros y Giecos? ¿genes puros o difusión?

domingo, 13 de septiembre de 2009

Milestone: Nueva Propuesta Curricular de la Carrera de Ingeniería de Sistemas

Una buena noticia para los sistémicos e informáticos del país para que no vuelvan a ser confundidos entre ellos. En la UNI, se ha presentado el Informe de la Comisión de Evaluación Curricular de la especialidad de Ingeniería de Sistemas. En este trabajo se busca hacer una distinción clara entre la ingeniería de sistemas y la ingeniería informática (un verdadero hito) y proponer una estructura curricular que brinde herramientas y procesos formativos de mejor nivel para los estudiantes de ambas carreras.

Revisen el informe, se sitúa en los divertos contextos de la carrera de ingeniería de sistemas desde un poco antes aparición en el Perú (1974) hasta nuestros tiempos actuales. Ahí verán cómo se ha terjiversado su concepto y se le ha asociado más a la informática a tal punto que en un aviso de El Comercio te puedes encontrar con un aviso diciendo que se buscan ingenieros de sistemas para realizar funciones de digitación y soporte de redes. Además es importante mencionar que esta propuesta también se ha basado en las expectativas tanto de los egresados como estudiantes.

Si quieren ir a la carnecita, vayan a las currículas propuestas para ambas carreras. Cursos como Diseño y Gestión de Procesos, Cibernética y Teoría de Control, Dinámica de Sistemas Aplicada, Taller de Modelamiento de Sistemas Viables, Sistemas de Gestión de Calidad, Gestión de Competencias, Prospectiva y otros se incorporan a la carrera que antes era un arroz con mango y los cursos mencionados se veían superficialmente en dos semanas de clases. Sin embargo, tengo algunas pequeñas observaciones -como otros- y que serán parte del debate y ayudarán a la retroalimentación. Rayos, me encantaría repetir la carrera si es así, ja ja. Los informáticos también estarán contentos porque su currícula adquiere más personalidad tecnológica pero no dejará de lado la esencia sistémica que todas las carreras debieran tener.

Para implementar esto se necesita básicamente una cosa -aparte de la plana docente-: voluntad política (ojo que el Rector Aurelio Padilla anunció, tal vez a la ligera, la creación de la carrera de Ingeniería de Software, no de Informática); esto es, que las autoridades que tienen voto para las decisiones aprueben la creación de la ingeniería informática (así tendremos dos carreras bien power) y estén concientes de que sería muy estúpido que la universidad que trajo la ingeniería de sistemas al Perú no se renueve en vez de entregar una propuesta de valor real a la sociedad.

¡A apoyar con todo!